Impacto ambiental

Alteraciones de la aerodinámica de la duna costera
por urbanización

Los factores que producen alteraciones en la hidrodinámica de la duna costera son:

1. La urbanización, forestación y edafización de los campos de dunas activos, interrumpe el aporte de arena continental que alimenta la duna costera durante la presencia de vientos del cuadrante oeste. Estos factores actúan disminuyendo las áreas de aporte de los sedimentos más finos, que integraban los campos de dunas activos y marginales con la presencia de crestas transversales y barjan reversibles. Al interrumpirse el aporte del sector continental, el único aporte de sedimentos proviene de la playa, incrementado el tamaño de grano de la duna costera.

2. Disminución de las áreas de aporte de arena, del sector de playa por acortamiento del ancho de playa por erosión.

3. Reducción de la capacidad selectiva del medio por disminución en el alcance (fetch) del viento en el perfil transversal de playa, por acortamiento del ancho de playa y de sus morfologías acrecivas (bermas y barras de lavado).

4. Alteración de la aerodinámica natural por efecto de las barreras eólicas, producto de la forestación y urbanización. Las barreras eólicas producen una alteración aerodinámica importante, ya que interrumpen el transporte de sedimentos incrementando los procesos de acumulación a barlovento y de deflación y estabilización a sotavento.

5. La forestación de los campos de dunas activos provocó una interrupción del aporte de material fino proveniente de las dunas transversales del cuadrante oeste y un enriquecimiento de materiales gruesos en la duna costera.

Estos factores producen, en aquellos sectores donde la duna costera no fue alterada en forma directa por el hombre, una estabilización, disminución en la altura, incremento en el tamaño de grano y aumento de la desviación estándard. Estos efectos de alteración antropogénica indirecta deberán considerarse en futuros planes de urbanización y manejo de estas áreas costeras; ya que al modificarlos se producirá una alteración directa en los ecosistemas costeros, incrementando los problemas de erosión sobre la playa. Hasta el momento solo se han tomado en cuenta en las planificaciones y evaluaciones de impacto los efectos directos, tales como extracción, nivelación y removilización de arena, forestación con tamarisco y otras especies alóctonas, degradación y construcción sobre la duna costera pero no la degradación inducida.

Vista del campo de dunas activo con su aerodinámica natural. Se observan bajos interdunales donde se acumula el agua luego de las precipitaciones y la ausencia de ríos con drenaje hacia la playa.	Imagen de Google Earth donde se ditingue el avance de la forestación cubriendo los campos de dunas activos, y la consecuente alteración de la aerodinámica litoral.

Factores antropogénicos que generaron erosión inducida

El hombre ha producido cambios importantes en el litoral atlántico de la provincia de Buenos Aires durante los últimos 30 años, como consecuencia de un rápido incremento poblacional, acompañado por una deficiente planificación y falta de políticas de manejo adecuadas para las áreas costeras. La falta de sustentabilidad entre las actividades humanas y las características geomorfológicas del sistema costero, han intensificado la erosión en los centros urbanos de mayor desarrollo.

Las causas antrópicas que ejercen su influencia en la erosión inducida sobre la playa son: extracción de arena de la playa y duna costera, eliminación de la duna costera, incremento en la escorrentía superficial por impermeabilización e introducción de vías de drenaje artificiales (Marcomini y López, 1995).

Construcción de defensas duras, espigones, rompeolas, paredones, etc

En el área de estudio no hay estructuras duras que produzcan un interrupción importante en la deriva litoral. Las estructuras duras reconocidas a lo largo de la costa en estudio son muelles de pesca, y paredones verticales e inclinados para proteger en muchos casos los frentes de los balnearios. Los efectos erosivos producidos por los muelles de pesca en la interrupción de la deriva en el sector en estudio, no alcanzan la magnitud de los detectados para el Municipio de La Costa por López (1996) para los muelles de Santa Teresita, Mar del Tuyú y Mar de Ajó, posiblemente debido a que la construcción es más reciente. Los paredones verticales e inclinados presentes en muchos balnearios, incrementan la erosión de la playa durante las sudestadas, períodos en los que las olas aumentan su poder erosivo por reflexión.

Extracción de arena de playa

La explotación de arena es otro factor importante como causa de erosión inducida. La arena de mayor aptitud para la construcción es la de la berma o barras estacionales por su granulometría más gruesa y su mayor contenido de conchillas. La destrucción de estas bermas o barras incrementa la erosión de playa especialmente luego de tormentas que involucran un incremento del nivel. La explotación de arena de playa fue prohibida en toda la costa de la provincia de Buenos Aires. No obstante ello, existen explotaciones clandestinas e individuales en las distintas localidades (Marcomini y López 2007).

Marcomini y López (1999) investigaron el efecto producido por la extracción de arena de playa de una cantera ubicada al suroeste de Centinela del Mar (Partido de Lobería) sobre la dinámica, morfología y textura de las playas localizadas entre Miramar y el Arroyo Nutria Mansa. Asimismo, evaluaron el efecto de recuperación de las playas en la zona de extracción y en sectores aledaños (caso tipo: Mar del Sur), luego del cese de las tareas de explotación en junio de 1997. Esta actividad minera afectó una extensión de 1.800 m de playa, sobre una superficie de 200.000 m² y un volumen estimado en 150.000 m³ de arena. Las tareas de extracción minera se realizaron principalmente en los sectores de berma y playa frontal y abarcaron un extensión de 900 m a lo largo de la línea de ribera.

 

Dichos autores detectaron los siguientes cambios en el ámbito costero:

- Incremento brusco en la velocidad de retroceso de la costa durante el período 1984 - 1997, en todas las localidades monitoreadas, en concordancia con el inicio de las actividades mineras en la playa en el año 1988.
- Aumento de las velocidades de retroceso de la línea de costa hacia el sitio de extracción.
- Incremento en el tamaño de grano de los sedimentos y en la desviación estándar (peor selección), lo cual estaría indicando un aumento en las condiciones erosivas.

Los análisis morfológicos, texturales y las observaciones de campo demostraron que la explotación del yacimiento generó una onda erosiva que se desplazó en el sentido de la deriva litoral. El efecto de la explotación produjo una disminución en la saturación de las corrientes litorales, favoreciendo la degradación de los depósitos arenosos e incrementando la velocidad de retroceso de los acantilados, en especial de aquellos friables como las costas de dunas.

Las evidencias morfológicas que corroboraron este hecho fueron: el hallazgo de numerosas plataformas de abrasión desprovistas en su totalidad de sedimentos arenosos en sectores donde antiguamente existían depósitos de playa, formación de escarpas en dunas actuales, remanentes de dunas aislados en sectores de playa, cortes de senderos vecinales por acantilados activos y extensión de la actual zona intermareal hacia sectores con edificaciones que antes quedaban fuera de su influencia. La evaluación efectuada luego de un año del cese de las actividades de explotación de la cantera, en el área de extracción, dio como resultado un balance sedimentario positivo (acumulación), a lo largo de los 900 m de playa que ocupaba la muesca de extracción. Se estimó una acumulación neta de 23.300 m³ durante el primer año.

Degradación de la duna costera

La destrucción de la duna costera es uno de los factores principales que pone en riesgo el ecosistema natural. La misma cumple un rol fundamental en el mantenimiento del equilibrio y la conservación de los sistemas costeros. Las dunas costeras proveen la arena necesaria para la reconstrucción de la playa. Durante las sudestadas, tormentas que en la provincia de Buenos Aires por lo general están acompañadas por un incremento del nivel del mar (Surge storms), la playa posterior y la duna son erosionadas y la arena es transportada hacia el sector de mar adentro (offshore) o en el sentido de la deriva litoral, conformando barras longitudinales (long shore bars). Luego, en los periodos de calma (swell), el material vuelve a ingresar a la playa.

De esta forma las dunas actúan como una defensa natural y flexible para proteger la línea de costa. Actualmente, en muchas localidades, la duna fue destruida y reemplazada por edificios, estacionamientos o avenidas costaneras, y la playa distal ocupada por balnearios. Es así que el equilibrio natural entre la duna y la playa ha sido severamente alterado incrementando la erosión. Durante las tormentas, el flujo substurado de las olas no encuentra la arena suficiente para removilizarla de la duna ya que la misma no existe o fue fijada, y por consiguiente erosiona la playa. En el centro de la ciudad de Villa Gesell la duna costera ha sido totalmente degradada, los balnearios se ubican sobre la playa posterior y el frente costero esta ocupado por edificios de varios pisos.

Drenajes artificiales a la playa

Los diseños urbanos con calles perpendiculares a la costa que terminan en el mar han modificado sustancialmente la morfología costera introduciendo canales de desagüe artificiales luego de fuertes tormentas. En el paisaje original, el agua de las precipitaciones infiltraba directamente en el acuífero y el excedente quedaba retenido en los bajos interdunales. Actualmente se han introducido drenajes artificiales que se encausan por las calles perpendiculares a la costa, para terminar en la playa, introduciendo una nueva causa de erosión al sistema. Sumado a este factor, la escorrentía superficial se incrementó notablemente por la impermeabilización producto de la urbanización y la forestación, razón por la cual los volúmenes de agua para evacuar luego de fuertes precipitaciones son mucho mayores.

En la ciudad de Villa Gesell la topografía original del terreno se halla bastante bien conservada, con lo cual es común la formación de pequeñas lagunitas por detrás de la duna costera que muchas veces obstruyen momentaneamente la avenida costanera.

Se ha observado, durante distintas etapas del relevamiento, que las autoridades municipales generan erróneamente canales de desagüe que disectan la playa para aumentar la velocidad de escurrimiento de las aguas, aumentando la erosión de la playa.
Para una planificación racional las avenidas costaneras deberían terminar a una distancia de aproximadamente 150 m desde la línea de altas mareas de sicigias y la duna costera debería mantenerse intacta para retener el agua de lluvia incrementando la infiltración en la interfase agua dulce – agua salada para impedir el desplazamiento al continente de la cuña salina.

Implantación de vegetación alóctona sobre la duna costera.

Naturalmente la duna costera se halla desprovista de vegetación o presenta matas aisladas de Spartina ciliata o Unquillo. El hombre introdujo especies arbustivas como el tamarisco en la duna costera. Esta introducción produjo en ciertos sectores costeros la pérdida de movillidad de la dunas, con la consecuente interrupción de las condiciones de transporte natural entre estos dos subambientes. Estos arbustos obstruyen el transporte de sedimentos entre la duna y la playa incrementando las condiciones erosivas especialmente luego de las sudestadas.

Tareas de limpieza y nivelado de playa para instalación de carpas

Algunos subambientes de las playas son modificados especialmente durante los períodos veraniegos para la instalación de carpas y limpieza de playa. Por lo general se producen importantes removilizaciones de arena con el consecuente cambio en la pendiente de equilibrio del perfil de playa. Por lo general estas tareas tienden a nivelar la playa cambiando especialmente la pendiente de la playa distal, destruyendo la configuración de la berma. Este efecto hace que el perfil se torne más vulnerable a la erosión ante nuevos eventos de tormentas extraordinarias, que se dan por lo general con mayor frecuencia en el verano.

Circulación vehicular y pedestre

La circulación de vehículos sobre la playa es un hecho muy frecuente en estas localidades a pesar de no estar permitida. El tránsito vehicular se da tanto sobre la playa como por la duna costera. Por lo general los vehículos circulan por la playa frontal ya que posee un mayor grado de compactación. Esto produce un impacto que se revierte en poco tiempo, debido a que posteriormente se restablece la pendiente de equilibrio por la acción marina en el sector intermareal. Las huellas dejadas en la playa distal, por lo general persisten por mayor tiempo, ya que no son alcanzadas por la acción del oleaje, sino que las geoformas se recuperan por efecto eólico y depende de las condiciones climáticas posteriores. Si bien en muchos casos el efecto físico puede ser manejado regulando el pasaje de vehículos, en aquellos sectores donde sea sumamente necesaria la circulación, el impacto sobre el medio biótico es irreversible. La circulación de vehículos en la zona intermareal, produce mortandad de las especies de bivalvos. Esta mortandad se da no solo por aplastamiento del individuo, sino que también producen cambios en la compactación de los sedimentos superficiales que podrían impedir a muchas especies desenterrarse para efectuar sus migraciones mareales.

La circulación de vehículos sobre las dunas costeras, produce en muchos casos la ruptura de los ecosistemas, especialmente en aquellas que tienen cierto grado de estabilización y cobertura vegetal. La circulación genera efectos deflacionarios por ruptura de la vegetación que hacen que cambien las condiciones de saturación en sedimentos y soterramiento de especies ya adaptadas, así como también la degradación de las dunas originales.

La playa y el impacto del hombre

La configuración de los perfiles de playa es un geoindicador apropiado para diferenciar la erosión inducida por el hombre y determinar la vulnerabilidad a la erosión de una playa. Marcomini (2002) diseñó un modelo que muestra la transición morfológica que tiene el perfil de playa ante un incremento en la erosión inducida. A continuación se describe la transición de los perfiles de playa para los distintos estadíos ante un incremento en la erosión inducida por el hombre:

Estadío A: El perfil presenta una típica morfología acrecional con la presencia de una berma estable y una o dos transcicionales. Esta configuración se distingue en zonas donde la duna costera está conservada. El número de bermas transicionales varía estacionalmente. Estos perfiles no presentan ningún grado de impacto antropogénico.
Estadío B: Las bermas transicionales en los perfiles disminuyen o desaparecen. El perfil es convexo con la presencia de una berma estable.
Estadío C: El perfil es compuesto presentando un sector cóncavo en la playa distal y una configuración rectilínea en la playa frontal que conforma el sector intermareal. Luego de las tormentas es frecuente la presencia de una escarpa de erosión al frente de la berma.
Estadío D: Este estadío está representado por una configuración lineal acompañado de una disminución en el nivel de la playa. No hay bermas sobre la playa pero es frecuente la formación de una barra de lavado luego de las tormentas.
Estadío E: El perfil presenta una configuración cóncava y representa el mayor grado de erosión inducida.
Con el uso de este modelo es posible estimar los distintos estadios erosivos que presenta la playas por los impactos antropogénicos.