Los ambientes costeros son el producto de muchos
factores complejos interactuando, que modifican las
rocas y los sedimentos que componen la costa. Los
procesos marino y eólico son los principales
modeladores de la costa de Villa Gesell.
Para comenzar a insertarnos en el estudio de las zonas costeras es importante
tener en claro la diferencia entre costa, playa
y línea de costa. La costa es una franja de territorio
cercano al mar, que se extiende hacia el continente hasta donde aparece
el primer cambio en el rasgo morfológico
no influenciado por el proceso marino. La playa es un
depósito de material no consolidado formado por depositación
marina. Puede estar compuesta por sedimentos de distinto tamaño de grano,
desde arena (playas de la provincia de Buenos Aires) hasta gravas (playas
patagónicas).
La línea de costa es el límite entre la costa y la playa.
Frecuentemente está representada por el pié de un acantilado
o de la duna costera.
Costa, línea de costa
y playa, en distintos tipos de costa de la provincia
de Buenos Aires.
Aerodinámica
El viento tiene una influencia importante
en la geomorfología costera ya que
constituye un agente de erosión,
transporte y subsecuentemente de depositación
de sedimentos.
Existe
una relación
proporcional entre la velocidad del
viento y la
tasa de transporte de los sedimentos.
La forma de transporte principal es
por saltación,
es decir que las partículas
de arena son levantadas por el viento
y trasportadas en el aire dando saltos.
Cuando la partícula cae, su
impacto sobre la arena, levanta otras
partículas
que son nuevamente movilizadas por
el viento. La altura del trasporte
depende
de la velocidad del viento y por lo
general es de hasta 1,4 m. En la playa
podemos observar este transporte eólico
cuando la arena “nos pica las
piernas” en los momentos de mucho
viento.
Las dunas son geoformas
deposicionales cuya configuración
y tamaño
depende de la duración, dirección,
velocidad y alcance del viento, del tipo
de sedimentos y de la vegetación.
Las dunas y las dunas en voladura “bowouts”,
son típicas
de ambientes costeros.
Las morfologías
de las dunas litorales más comunes
son: (tocar sobre las fotos)
1)
Crestas transversales: Cordones
de arena elongados formada por predominio
de vientos unidireccionales y alto aporte
de arena. 2) Crestas barjanoides: Crestas
de arena sinuosas. Indican también
vientos unidireccionales pero menos
aporte o mayor velocidad de viento
que las morfologías anteriores. 3) Barjan: dunas
semilunares con sus extremos (cuernos) apuntando
hacia el viento debido a que los mismos migran
más rápido que el cuerpo central,
formadas por una dirección de viento
predominante. 4) Dunas parabólicas: crestas
arqueadas con la parte cóncava
apuntando en la dirección del
viento. Tienen altas pendientes, e indican
vientos unidireccionales, menor aporte
y presencia de vegetación. 5) Dunas en voladura: cubetas
o canaletas formadas sobre dunas previas.
6)
Montículos de arena: núcleos
irregulares formados al reparo
de la vegetación 7) Duna costera,
duna anterior, foredune: cordones
o montículos de arena adyacentes
a la playa que sirven como buffer para
las tormentas. 8) Dunas reversibles: Crestas
empinadas debidas a dos direcciones de
viento predominantes en direcciones opuestas.
El principal factor de control en el crecimiento
de una duna es el aporte de sedimentos que proviene
de la playa posterior, por ser el sector que permanece
seco durante la mayor parte de los días.
Crecimiento
natural de
Spartina ciliata y Panicum
racemosum
sobre los sectores estabilizados
del campo de dunas activo
Las
dunas al evolucionar tienden a ser colonizadas
por vegetación que las hacen más estables.
La vegetación natural de estas dunas es
por lo general de gramíneas que
tienen largas raíces y rizomas que permiten
la depositación
de arena “in situ”.
Las dunas tienen usos múltiples. Pueden emplearse
como áreas de recreación, urbanización
y forestación. Asimismo constituyen habitats
de aves y en muchas localidades costeras son el único
acuífero disponible como abastecimiento de
agua dulce para las poblaciones.
Hay que tener presente que, los campos de dunas
costeros, actúan como protección
de costa en muchos sistemas litorales y que
constituyen una de las principales fuentes de abastecimiento
y sumidero de arena.
A pesar de que las dunas son rasgos comunes en
costas arenosas son fuentes finitas (se acaban)
y necesitan
ser protegidas y preservadas. Las dunas han sufrido
la presión humana y muchas veces el efecto
producido por el hombre es irreversible.
Hidrodinámica
Los principales factores modeladores en la hidrodinámica
litoral son las olas, las corrientes litorales y
las mareas. Las corrientes oceánicas no influyen
en el transporte litoral y por consiguiente en las
morfologías asociadas al proceso marino.
Olas
Las olas son sin lugar a dudas el factor modelador
dominante en costas abiertas. En su mayor parte
son ondas generadas por el viento que se desplazan
en
la superficie de los océanos. Tienen por
lo general un período -tiempo que transcurre
entre el paso de dos crestas de ola- que puede
variar de 1 a 30 seg. Las olas con períodos
menores a 5 o 6 segundos, conocidas como “seas” son
generadas por vientos locales; mientras
que las olas que poseen su área de generación
alejadas del área costera se conocen como “swell” y
por lo general son más regulares, achatadas
y con mayor período.
Las olas forman corrientes que pueden desplazar a los sedimentos, en
forma transversal a la costa (onshore-offshore) o paralelas
a la costa que se denominan corrientes longitudinales (longshore
currents).
Las olas cambian estacionalmente y por consiguiente se produce un reajuste
de la forma de la playa.
El material erosionado es transportado hacia la playa sumergida formando
bancos submarinos que luego retornan a la playa bajo condiciones de ola
normal (swell).
En el hemisferio norte el clima de ola más severo se produce en
el invierno. Las mediciones llevadas a cabo en las playas de Buenos Aires
demostraron una tendencia inversa, es decir perfiles acrecivos en invierno
y erosivos en el verano.
Corrientes litorales
Las corrientes litorales son flujos de agua paralelos
o normales a la playa, producidos por la acción
del oleaje. El flujo de agua paralelo a la costa,
formado por el ingreso a la playa de olas en
forma oblicua se denomina corriente de
deriva litoral.
Estas corrientes
generan un flujo turbulento que se desplaza entre
la zona de rompiente y la playa.
La arena de la playa, al recibir el impacto de la ola en forma oblicua
se desplaza perpendicular al frente incidente (swash) y cuando
la ola se retira, la partícula baja siguiendo la máxima
pendiente de la playa (backwash).
Las infinitas partículas de arena movilizándose con cada
ingreso de la ola generan un movimiento de arena a lo largo de la costa
que se denomina deriva litoral.
Como el sentido de la deriva litoral depende del ángulo
de incidencia del tren de olas, vamos a tener variaciones periódicas
en la dirección de la misma. Por ejemplo, si el tren de olas
proviene del norte o noreste la deriva será hacia el sur. Sin
embargo cuando el frente de olas proviene del sur o sudeste, la deriva
litoral será hacia
el norte y posiblemente movilizará mayor cantidad de arena dada
la mayor altura de ola característica de estos frentes de tormenta.
Entonces, para realizar cualquier intervención en el sector costero,
será necesario calcular la deriva neta, que sería
la sumatoria de las sucesivas derivas durante un período prolongado
de observación. Muchas geoformas son indicadoras de deriva litoral
neta.
Mareas
El desplazamiento vertical más común
en el nivel de los océanos, es el producido
por las mareas astronómicas. Las mareas
son ascensos y descensos periódicos del
nivel del agua, causados por la interacción
gravitacional entre la tierra, la luna y el sol.
Son ondas de largo
período (12 o 24 horas) que se desplazan
en la superficie de los océanos.
Las mareas pueden ser diurnas (una pleamar y una bajamar en 24 horas),
semidiurnas (2 pleamares y 2 bajamares cada 24 horas) o mixtas. Las amplitudes
de marea pueden llegar hasta los 11 m en la patagónia argentina.
En Villa Gesell son semidiurnas con desigualdades diurnas y la amplitud
máxima es de 1,34 m y la media de 0,69 m.
Las mareas de sicigia son las de máxima amplitud y se forman cuando
la luna y el sol están alineados con la tierra.
Las horas y alturas de mareas cambian continuamente y sus estimaciones
se hallan tabuladas en las “Tablas de Marea” que edita
anualmente el Servicio de Hidrografía Naval. También
están disponibles
en internet en el site
del Servicio de Hidrografía Naval.
Tormentas
Las tormentas denominadas “surge” son
causadas por una combinación de un centro
de baja presión barométrica y altos
vientos hacia la playa que pueden elevar el nivel
del agua unos cuantos metros. A pocas profundidades,
el viento puede apilar agua contra la playa o desplazarla
hacia aguas profundas.
Cuando estas tormentas coinciden con una marea de sicigia, se produce
un aumento importante del nivel del mar razón por la cual estos
eventos ocasionan una importante erosión sobre la playa.
Observá la playa de Villa Gesell
durante una tormenta extraordinaria
En la costa bonaerense estos episodios están representados
por las sudestadas que pueden elevar el nivel hasta 2 m. Las mismas
se producen
durante todo el año, pero con más frecuencia a fin
de invierno y principio de primavera y verano. Su duración
es variable entre 24 y 140 horas, aunque habitualmente persisten
durante dos o tres días.
Estudios de las últimas décadas del siglo pasado muestran
que la frecuencia de sudestadas aumentó hacia fines del siglo
y la perspectiva es que el sistema climático refuerce la dirección
de viento del este-sudeste sobre el estuario del Río de la
Plata en el mismo período. La tendencia en esta región
indicaría
que la frecuencia de sudestadas irá en aumento.
Otros eventos de tormentas tipo “surge” se han registrado a
partir de tormentas del sudoeste con variaciones significativas en el nivel
del mar, como por ejemplo la tormenta ocurrida el 31 de enero de 1999,
la cual alcanzó en el Municipio de la Costa un record de altura
de 3,13 m.
Las tormentas de este tipo modifican el perfil de playa disminuyendo
su nivel. Durante estos eventos, al subir el nivel del mar y aumentar
la altura
de ola, se produce una movilización de arena de la playa posterior
(bermas) y anterior hacia la playa sumergida donde conforma barras
sumergidas. Estas barras permanecen estables durante algunos días
y cuando vuelven las condiciones de ola normal (swell) comienzan
a movilizarse nuevamente hacia la playa frontal recomponiendo el
perfil de playa.